Las pruebas de aceptación en fábrica (FAT) a distancia son otro ejemplo de solución digital nacida como consecuencia de la pandemia que ha llegado para quedarse. La oferta de FAT remotas de Getinge es una alternativa sencilla, eficiente y sustentable para los clientes de la empresa. 

Un sistema FAT remoto sustituye la presencia física del cliente por una comunicación de voz en tiempo real, así como el intercambio de vídeos, archivos e imágenes. 

”Cada vez recibimos más solicitudes de FAT remotas, por lo que definitivamente es una solución que será atractiva también después de la pandemia. Lo más probable es que veamos una mezcla de pruebas remotas y tradicionales. Sigue habiendo situaciones en las que la presencia física del cliente es más beneficiosa”, afirma Erik Kakes, director de marketing y ventas de Applikon en Getinge. 

Erik continúa: ”Otra posibilidad interesante es crear una versión híbrida en la que un representante del cliente esté presente físicamente, mientras otros siguen la prueba a distancia. Se trata de una alternativa eficiente y sustentable, que reduce considerablemente el tiempo de desplazamiento 

El principal reto de una FAT remota es crear una ”transmisión” visual que compense la falta de posibilidades de ver y tocar que forman parte de la interacción física con el producto probado. 

”Hasta ahora, la mayoría de las FAT remotas realizadas en Getinge han utilizado una o dos cámaras de smartphone, preferiblemente apoyadas por estabilizadores de cardán. En el futuro, creo que utilizaremos tres o cuatro cámaras en diferentes posiciones y permitiremos a los participantes cambiar entre ellas. Los clientes deben tener el control de lo que quieren ver”, explica Imko Gaastra, director de producto de la fábrica Applikon de Getinge. 

Las herramientas de reuniones sin complicaciones, como Zoom o Teams, se encargan de la interacción entre los participantes, y todos los archivos y datos se almacenan; listos para compartirse tanto en versión impresa como digital. 

Getinge está abierto a crear varias configuraciones de FAT remotas en función de los deseos del cliente. La prueba puede transmitirse de forma continua, o el cliente puede elegir conectarse para seguir las partes más interesantes. 

”Todo el material de los vídeos es, por supuesto, grabado. Esto permite a los clientes revisarlo y compartirlo dentro de la organización”, dice Imko. ”Además, estas grabaciones pueden utilizarse para crear capacitación para los empleados locales que utilizarán el producto”. 

Hasta ahora, la fábrica de Getinge Applikon en los Países Bajos ha realizado cinco FAT remotas. El centro de Getinge, en Suecia, ha realizado más de 75 FAT remotas, mientras que la unidad de fabricación de Toulouse, en Francia, ha realizado 30 pruebas. 

Acerca de la FAT 

La prueba de aceptación en fábrica se realiza cuando el producto está montado y listo para su entrega. El proceso verifica que el equipo solicitado está construido y funciona como se pidió. La prueba se realiza en la fábrica. 

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